Los retratos paternales, no son un tema exento en el documental moderno, por el contrario, la intimidad familiar ha tomado bastante fuerza en este tipo de cine en los últimos años, no sólo por su temática sino por la capacidad de explorar en el lenguaje audiovisual y profundizar en esas matices psicológicas de lo filial, que en algunos casos, se vuelve un ejercicio catártico o reivindicativo; pero esto se hace mucho más notorio, cuando los hijos de cineastas icónicos hacen retratos documentales de sus padres, porque su vida y obra se confunden, al igual que sus recuerdos, estilos, pensamientos y evidentemente, relación familiar. De esta azarosa selección, encontramos tres títulos que no sólo le hacen eco a la relación padre e hijo cineastas, sino que son propuestas, con un estilo visual, narrativo o documental diferenciador u original en su planteamiento, como los vamos a ver a continuación en estas películas que comparten el espíritu independiente cinematográfico, la iconoclastia y la lucha contra un sistema, que reivindicó su obra (en este apartado vale la pena agradecer a Orishas Cine Art , no sólo por las películas, sino por este inesperado ciclo)
A Fuller Life (2013)
Samuel Fuller, fue uno de esos personajes tan independientes, directos y controvertidos en su vida, como en su filmografía, no sólo por la violencia implícita de sus obras sino por sus formas de producción y estilo crudo, que tuvo como protagonista al conflicto bélico, un vehemente sentido de la tolerancia y una narrativa tan particular como eficiente, que fue asimilada por los Scorssese, Wenders e idolatrado por la Nouvelle Vague; ese mismo espíritu aventurero y libre, fue retratado por la única hija de Fuller, Samantha, directora que sí bien sólo tiene este documental en su haber, propone un interesante ejercicio de memoria y reflexión sobre su padre, a partir de sus diarios y de uno cuantos amigos y seguidores, que se vuelven la voz in, de este director icono del cine estadounidense independiente.
Los inicios de Fuller en el periodismo, así como su incesante búsqueda de una narrativa propia, al igual que la hermandad que se forma en los círculos bélicos, su inconformismo, espíritu democrático y resistencia, se mezclan o confunden con sus películas directas, crudas visual y narrativamente, pero ante todo, libres, en su construcción.
De tal palo, tal hija.....cineasta
Aunque Samantha Fuller, no es propiamente cineasta - es filósofa y empresaria artesanal-, es la custodia de la obra de su padre, y con este trabajo, inicia su carrera en el cine, un documental al uso, pero atípico en su construcción, donde se recogen 12 fragmentos de su autobiografía - Un tercer rostro- y se ponen en pantalla, esas misma anécdotas, recuerdos y propósitos, leídos a través de diversas voces, emulando no sólo a Fuller sino en cierta medida a un cine, que más adelante, impactará en lo que conoceremos como nuevo cine americano.
Cabe resaltar que en este documental, hay imágenes exclusivas, materiales vistos o exhibidos por primera vez, algunos muy personales de Fuller, otros de la guerra o roshes no usados, pero todo enfatizado en la vida de un hombre tan lucido como aventurero.
Zoom in: Presentado en diversos festivales, principalmente el Venice International.
A Cinema Prayer (2019)
La obra de Andrei Tarkovski, es posiblemente una de las más estudiadas y analizadas, no sólo por sus conexiones con la poesía sino por ese carácter hagiográfico y mártir que dispuso en la pantalla grande, que no era otra cosa que su propia vida; pero también la obra de Tarkovski, es una que está repleta de paradojas: las complejas relaciones con su padre, el poeta Arseni Tarkovski, del cual utilizará varios de sus poemas en sus películas, su amor por una Rusia que lo censuraba, o mejor el regimen, y esa soledad de un hombre sensible con su época, y con esa idea de esculpir un tiempo, que le resultó ajeno; todo esto es recogido por su hijo Andrei, en su primer documental, en el cual a través de varias secuencias de las películas de su padre, material de archivo inédito y los poemas de su abuelo, va construyendo un relato, que además de retratar al cineasta, lo hace del humanista y reflexivo hombre, que además de historias, puso en común a la naturaleza, la libertad y la religión; por algo su primera película y última película, inician con un árbol plantado.
Tarkovski hijo, preservador del material de su padre, nos presenta un documental separado en ocho capítulos, que evoluciona desde la idea de la infancia hasta el acercamiento de la muerte; casi, como una propuesta ontológica, que se responde a través de esas nueve películas que hizo su padre.
Zoom in: Favorita del público en varios festivales
Rocha que voa (2002)
El cineasta brasileño y representante del cinema novo: Glauber Rocha, estuvo exiliado en Cuba por un buen tiempo, de cierta forma su cine y personalidad fueron influyentes no sólo para el cine cubano, que tenía sus particularidades, sino para establecer esa idea, de un cine como acto revolucionario y cambio del pensamiento, al que se acogieron fácilmente varios directores, que no sólo seguían a Rocha, sino del que se hicieron amigo. Eryk Rocha, hijo de Glauber, recoge esta experiencia, y la convierte en un documental con tintes ensayísticos, en el que la figura del cineasta brasileño atraviesa ese intenso cambio en la cinematografía del momento. A través de diversas entrevistas a directores y amigos de Rocha, no sólo profundizamos en la vida del brasileño sino en sus intenciones cinematográficas; en cierta forma, este documental es un dialogo entre Brasil y Cuba, en términos cinematográficos, sociales y culturales, en el que la figura de Rocha, alude a esa utopía radical y feroz que fue la Latinoamérica revolucionaria, que se quiso desprender del yugo capitalista. Eso si, el documental, no escapa al amor, a la amistad y sobre todo, a la libertad, esa de la que tanto disfrutó Rocha padre, y a la que parece acudir su hijo, afamado documentalista, y heredero de una cinematografía muy personal.
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