21 ene 2015

Mind Game: Jugando con su (de)mente


                                              "La mente es como un paracaídas. 
                                                    No funciona si no está abierta."
                                                                                  Frank Zappa 

El director de anime, guionista y animador japonés Masaaki Yuasa, realizó en 2004, una de las películas más disparatadas y emblemáticas de la animación japonesa; éste, se ha destacado por utilizar las más diversas técnicas y estilos que van desde las tecnologías más novedosas hasta las más artesanales, complementando sus psicodélicas -lisérgicas- historias. Igualmente, es un director que ha colaborado para grandes de la industria de la animación tanto en la televisión y el cine; aún así, son sus alternativas manifestaciones audiovisuales las que le han dado a conocer, llevándolo no sólo  a ganar premios en festivales sino a participar en series tan comerciales y a la vez extrañas como Adventure Time (Cartoon Network), para los estudios Ghibli y muchas más.  Sin embargo, en este artículo nos vamos a concentrar en su obra de culto llamada Mindgame.

  
Escrita por el mismo Yuasa, basándose en el cómic underground de Robin Nishi, este surreal, absurdo y metalingüístico cuento de oportunidades perdidas, amores recuperados y finalmente, sobre la vida misma. La historia se centra en Nishi, un joven miedoso , solitario y poco arriesgado, dibujante de manga, que se encuentra en el metro con Myon, la chica de la que esta enamorado desde la infancia; éste la ayudará a recuperarse de un pequeño accidente; Myon lo invitará - como agradecimiento- al bar de sushi que maneja con su hermana. Sin embargo, Nishi encontrará la muerte en este sitio, por parte de unos mafiosos que están cobrando las deudas del restaurante. Cuando Nishi llega al "cielo", en su afán por recuperar, no sólo su vida sino el tiempo perdido, desafiará a dios, y logrará volver a la tierra, haciendo todo lo que en vida no hizo,  aún así terminará junto a Myon y su hermana, en el fondo de una ballena; a partir de este giro,  la película se impregna de todo un ambiente surreal, lleno de color y una muy extraña fantasía.

Con todo un desfile de técnicas, estilos, composiciones y desfragmentada narración, este director japonés, nos va mostrando una serie de secuencias que aluden a la memoria, a las probabilidades y a los pretéritos que afectan nuestra vida, o -mejor- la de los personajes. Sin mucha lógica, más bien, sustentado por la coherencia del montaje y de la repetición de las imágenes, este trabajo se va a volver cíclico y sin final, mucho mas sujeto a los deseos de los personajes.


Con un impresionante trabajo en el diseño de las animaciones, donde podemos ver las últimas técnicas por computador, infografías, rotoscopiados y demás, así como una serie de manipulaciones artesanales, donde además toma una relevancia absoluta el uso del color y todas las concepciones artísticas de Studio 4°C,  Beyond C. entre otras, y la creatividad de Yuasa, quien también interviene en la creación de los personajes. Complementando la parte de la imagen, el equipo de trabajo llega a utilizar los más diversos referentes y homenajes de gran parte de la animación mundial. Igualmente, debemos destacar el sonido,  música - banda sonora- por parte de Fayray, Seiichi Yamamoto y Sheinchiro Watanabe, quienes se decantan por sonidos pop, electrónicos y lo superlativo de la misma animación.

Este cuento con aires existencialistas, humor hiperbólico y dos o tres de las secuencias más absurdas e hilarantes, que se han presentado en el cine de animación contemporáneo, por ejemplo, la secuencia en que Nishi conoce a un dios, bastante fetichista, camaleónico y cinematográfico, que lo reta volver a la vida sin dejar de lado; la psicotrópica escena(s) de la danza de liberación que hacen estos personajes dentro del estómago de la ballena, y muchas otras que se me escapan en el momento.

  
Este trabajo que es un deleite para la vista, radical en su puesta en escena y que sabe hilvanar a través de la imagen-montaje, toda una ilógica narrativa de persecuciones, referentes bíblicos - Jonas y la Ballena-, amores perdidos y nuevas oportunidades, todo bajo la intensidad de los colores, los collages y desenfreno de una narrativa hiperritmíca. Un viaje de ácidos por la mente humana o de Nishi....o de todos.

Zoom in: Diversos premios y nominaciones en festivales de animación 
La película fue estrenada en el Festival  New York Asian Film...

Montaje Paralela: It's such a beautiful day (2012)



2 comentarios:

  1. Esta película no sabía que existía hasta que un amigo me dijo que la viera y así lo hice porque él y yo tenemos gustos parecidos. Me gustó mucho, la verdad. Me pareció un film totalmete diferente a todo lo que había visto en animación. Esa mezcla de imágenes con ese tratamiento tan particular, me parece algo súper original. Me ha encantado este post!

    Saludos y que tengas un buen día, Andrés

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  2. Es un gran trabajo, las animaciones son geniales, y la historia es muy loca pero entretenida, vale la pena ver más trabajos de este director, un saludo

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