20 jun 2013

Beast of the Southern Wild: Realismo mágico americano

 

              "Los animales fuertes saben cuándo tienes el corazón débil.     
       Eso les da hambre y empiezan a perseguirte".


Una de las películas sorpresa en los premios Oscar, pero avalada por varias nominaciones y premios en diversos festivales, principalmente su debut en Sundance, considerada, uno de los largometrajes más importantes y sólidos de ese festival; sin dejar de lado La Cámara de Oro en Cannes y sobre todo la impresionante actuación de Quvenzhané Wallis, quien se lleva los aplausos y en varios casos, los premios a los que estuvo nominada.

Beast of the Southern Wild, es uno de esos ejemplos, donde la independencia no sólo es sinónimo de calidad sino de innovación y recursividad que funciona como propuesta filmica y narrativa, y en cierta forma, como crónica sobre el paso a la madurez y el dejar atrás la inocencia de la niñez en una comunidad donde la magia y la dureza de la vida están presentes en cada uno de los personajes y en esa ciudad/isla ficticia - que igual existe no sólo en Estados Unidos sino en la mayor parte de los países en pleno desarrollo- que es conocida como Bathtub (Isle de Charles Doucet); una película donde el agua, la supervivencia, los sueños y "eso" que los latinoamericanos llamamos realismo mágico se fusionan con hechos presentes como el suceso del Katrina -del cual es obvia la influencia en la película-, el desprendimiento familiar y el apoderamiento de la cultura, la comunidad, de los propios y cercanos: de la familia.  


Sin embargo, la película es un gran conjunto de elementos visuales, musicales y todas esas representaciones que hacen del sur de los Estados Unidos, una geografía llena de magia, contrastes, absurdos y dificultades, donde la rudeza y lo salvaje no sólo está presente en las personas sino en su propio entorno, y de ésto se aprovecha el director de fotografía Ben Richardson, quien utiliza una luz dura durante el metraje pero apropiándose de las cualidades de la luz natural, aumentando el grano en otras, pero siempre buscando la poesía, el lirismo que emana la luz y las sensaciones que se generan a través de ésta. Una fotografía, que fue reconocida tanto en festivales como por críticos, quienes además celebraron la excelente y madura actuación de Quvenzhané Wallis, quien encarna a Hushpuppy, una niña de seis años, que convive con su padre Wink (Dwight Henry), el cual no sólo le enseña a sobrevivir sino a entender el sentido de la vida, de la comunidad, de los "sueños rotos" y la esperanza que está en su imaginación, y en si misma.



En definitiva, una película que logran mezclar realismo, fantasía y hechos actuales;  que logra darle fortaleza a la voz de la niña, quien no sólo ejerce su papel de protagonista sino como narradora y conciencia de la comunidad, del desarraigo de la niñez desde la mirada infantil de Hushpuppy, donde sus fantasías y realidades afectan su entorno, su dicha, su sensibilidad.

De forma pausada, coherente, con ciertas dosis de humor y absurdo Benh Zeitlin, logra un excelente debut, y para muchos (incluyéndome) la película mejor elaborada en términos de innovación no sólo artesanal sino en estructura fílmica, o en el caso más poético, la película que mejor asume la frase de "amor por el cine". 



El director
Aunque esta es la primera película/ largometraje del director estadounidense Benjamin Harold "Benh" Zeitlin, éste ha realizado varios trabajos audiovisuales, no sólo retratos de comunidades alejadas, sino  animaciones, cortometrajes y es compositor musical como lo hace en Bestias del sur salvaje, labor que se anexa a su trabajo de coguionista junto a Lucy Alibar - quien es la escritora del cuento o el libro adaptado-.

Zeitlin, después de este trabajo, ha recibido premios en las más diversas categorías y honores, que para el cine independiente, abren opciones y calidades que se reflejan en la pantalla, como lo hizo este joven director nacido en Nueva York. 

Zeitlin dándole indicaciones a la niña Wallis. 

Zoom in:La isla imaginaria de la película, Isle de Charles Doucet, conocida por sus residentes como Bathtub, fue inspirada por algunas comunidades de pesca independientes amenazadas por la erosiónhuracanes y la subida de los niveles de agua en la parroquia de Terrebonne en Luisiana, en particular la Isle de Jean Charles. La película fue filmada en el pueblo de la parroquia de Terrebonne en Montegut. (wikipedia)
Multipremiada en los más diversos festivales
Basada en la obra de un solo acto de Lucy Alibar: "Juicy and Delicious".

Montaje Paralelo: Donde viven los Monstruos (2009) 


2 comentarios:

  1. Bien elegido ese montaje paralelo, desde luego esta ha sido una de mis películas preferidas del 2012, sin duda. Estupenda entrada.

    Saludos
    Roy

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  2. Si es verdad una gran película, lección de vida, hecha de la forma más inteligente, un saludo igualmente.

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