“La felicidad es la distancia entre lo que tienes y lo quieres. Cuando la distancia es mínima, eres feliz. En ese orden de ideas, cuando no tienes nada, lo tienes todo”
Gracias a Cinevista Blog y otros medios, se tuvo la oportunidad de ver uno de los documentales y opera prima mejor reseñados y recibidos del cine colombiano; documental que junto a Apaporis y La eterna noche de las 12 lunas -que hasta hace poco estuvo en cartelera- han ido haciendo presencia en las salas de cine del país (aún de manera tímida y sesgada) con cierto éxito y criticas positivas, mostrando la cara oculta y bella de una nación que desconocemos. Don Ca, es un documental o no ficción, que toma o recoge la figura de Camilo Arroyo Arboleda, un hombre que hace cuarenta años dejó atrás su natal Popayán, por que literalmente se enamoró de un municipio olvidado en la Costa pacífica Colombiana; en El Naranjo (Guapí) Don Ca, como le dicen los pobladores se ha desempeñado en los más diversos oficios, y se ha convertido en una especie de consejero y maestro de niños de esa comunidad afrodescendiente.
Don Ca, el primer trabajo audiovisual de Patricia Ayala, es un documental que inicia como el retrato de un personaje particular, que inteligentemente se va mezclando con la realidad del pacífico colombiano, y finalmente con la del país; este retrato que deja no sólo una grandes reflexiones sobre la libertad, la convivencia con la naturaleza y en cierto modo el alcance de la felicidad, es finalmente una voz y cuestionamiento sobre lo que nos dictan las sociedades modernas y los parámetros establecidos de lo que es correcto y el "establecimiento" del individuo con su colectividad.
Pero Don Ca, no sólo es un documental que se quede en lo testimonial o la anécdota del hombre blanco viviendo en una sociedad a la que parece no pertenecer, es un documental con una excelente fotografía, principalmente insertos o planos que se componen como transiciones a otra secuencia, planos que se facilitan por el ambiente mismo del Pacífico colombiano, y que sabe aprovechar tanto Ricardo Restrepo (Fotógrafo) como la directora, detalles de la lluvia, generales del atardecer, movimientos del agua confluyen con las palabras de este personaje contradictorio o difícil de catalogar, que alejado de posturas hippies, religiosas o colonialistas, simple y sencillamente se ha dedicado a hacer lo que más le gusta: disfrutar de su propia libertad, y enseñar a estos jóvenes problemáticos o sin futuro, a no dejarse someter.
Con una estructura sonora bastante adecuada, la cual se centra en las palabras de Camilo Arroyave, algunas entrevistas con un tono a cine directo por parte de la directora, principalmente a los niños con los que convive Don Ca, y a otras personas cercanas a éste, principalmente en Popayán, ciudad no sólo de origen de este personaje, sino la parte diferenciadora tanto de Don Ca como del mismo documental, ya que en Popayán Camilo, con su frac y arreglo personal, regresa a sus orígenes tanto familiares como sociales, haciendo parte de una de las fiestas más importante del país, como lo es la Semana Santa; y en estos pequeños intervalos, Don Ca, se autocuestiona y reflexiona, si lo que ha hecho en los últimos años ha valido la pena.
Estructuralmente dividido en tres partes este documental, inicia con la presentación de Don Ca, sus labores y pensamientos, y de cómo van llegando las Bacrim (Bandas criminales emergidas del paramilitarismo) a su paraíso, una segunda etapa en Popayán, que nos muestra sus orígenes, linaje, material de archivo y a su propia familia, y una tercera en donde, la evolución, la violencia y la desazón no sólo empieza a aparecer en ese puerto, población sino en el mismo pensamiento de Don Ca.
Ayala, la directora y su equipo de producción, que inicialmente iban por un proyecto sobre el agua, se encuentran con este personaje en una lancha, en su lancha (una de sus mayores posesiones), y al ver su historia, y lo interesante que finalmente resulta ser este "sacamuelas", educador, criador de gallos de pelea y hasta "el coco" de los niños que se orinaban en la cama, terminan involucrándose en este proyecto de más de dos años de trabajo, y que resulta en este logrado, inteligente y visualmente bello documental, que no deja atrás su componente social pero que más que denunciar o tomar una posición política, se traduce en una visión y testimonio de un hombre que más allá de sus intereses, se ha involucrado con una comunidad tan alejada y olvidada por el estado, como tantas otras en el país; y todo en palabras claras, funcionales y acciones en donde la libertad, es la gran temática de este trabajo y de este hombre.
Patricia Ayala Ruiz, es la directora de este documental, periodista de formación y realizadora audiovisual, que no sólo ha estado involucrada en la generación de documentales sino en la coordinación y gerencia de festivales, o en este caso en la Muestra Internacional de Documental, jurado y miembro de muestras en donde el gran talante es el género de la no ficción.
Zoom in: Seleccionado en diversas muestras y festivales, ganador en el Fondo para el Desarrollo cinematográfico.
Montaje Paralelo: Into the wild (2007)
Link: http://www.doncaeldocumental.com/
Don Ca, el primer trabajo audiovisual de Patricia Ayala, es un documental que inicia como el retrato de un personaje particular, que inteligentemente se va mezclando con la realidad del pacífico colombiano, y finalmente con la del país; este retrato que deja no sólo una grandes reflexiones sobre la libertad, la convivencia con la naturaleza y en cierto modo el alcance de la felicidad, es finalmente una voz y cuestionamiento sobre lo que nos dictan las sociedades modernas y los parámetros establecidos de lo que es correcto y el "establecimiento" del individuo con su colectividad.
Pero Don Ca, no sólo es un documental que se quede en lo testimonial o la anécdota del hombre blanco viviendo en una sociedad a la que parece no pertenecer, es un documental con una excelente fotografía, principalmente insertos o planos que se componen como transiciones a otra secuencia, planos que se facilitan por el ambiente mismo del Pacífico colombiano, y que sabe aprovechar tanto Ricardo Restrepo (Fotógrafo) como la directora, detalles de la lluvia, generales del atardecer, movimientos del agua confluyen con las palabras de este personaje contradictorio o difícil de catalogar, que alejado de posturas hippies, religiosas o colonialistas, simple y sencillamente se ha dedicado a hacer lo que más le gusta: disfrutar de su propia libertad, y enseñar a estos jóvenes problemáticos o sin futuro, a no dejarse someter.
Con una estructura sonora bastante adecuada, la cual se centra en las palabras de Camilo Arroyave, algunas entrevistas con un tono a cine directo por parte de la directora, principalmente a los niños con los que convive Don Ca, y a otras personas cercanas a éste, principalmente en Popayán, ciudad no sólo de origen de este personaje, sino la parte diferenciadora tanto de Don Ca como del mismo documental, ya que en Popayán Camilo, con su frac y arreglo personal, regresa a sus orígenes tanto familiares como sociales, haciendo parte de una de las fiestas más importante del país, como lo es la Semana Santa; y en estos pequeños intervalos, Don Ca, se autocuestiona y reflexiona, si lo que ha hecho en los últimos años ha valido la pena.
Estructuralmente dividido en tres partes este documental, inicia con la presentación de Don Ca, sus labores y pensamientos, y de cómo van llegando las Bacrim (Bandas criminales emergidas del paramilitarismo) a su paraíso, una segunda etapa en Popayán, que nos muestra sus orígenes, linaje, material de archivo y a su propia familia, y una tercera en donde, la evolución, la violencia y la desazón no sólo empieza a aparecer en ese puerto, población sino en el mismo pensamiento de Don Ca.
Ayala, la directora y su equipo de producción, que inicialmente iban por un proyecto sobre el agua, se encuentran con este personaje en una lancha, en su lancha (una de sus mayores posesiones), y al ver su historia, y lo interesante que finalmente resulta ser este "sacamuelas", educador, criador de gallos de pelea y hasta "el coco" de los niños que se orinaban en la cama, terminan involucrándose en este proyecto de más de dos años de trabajo, y que resulta en este logrado, inteligente y visualmente bello documental, que no deja atrás su componente social pero que más que denunciar o tomar una posición política, se traduce en una visión y testimonio de un hombre que más allá de sus intereses, se ha involucrado con una comunidad tan alejada y olvidada por el estado, como tantas otras en el país; y todo en palabras claras, funcionales y acciones en donde la libertad, es la gran temática de este trabajo y de este hombre.
Uno de esos trabajos que, como otros documentales, no sólo se quedan en lo anecdótico, sino que adquieren concepciones sobre una temática, y esta temática se va respondiendo o se va convirtiendo en un manifiesto sobre las distintas acepciones de una palabra, tema o idea, en este caso, la libertad, abierta a muchas interpretaciones y contextos, que van siendo expresados por Don Ca, un personaje con una filosofía tan particular como su propia vida, alejada de etiquetas de bondad o sacrificio, sino de un hombre que decidió tomar otro rumbo en la vida, y salirse o desprenderse de sus propios códigos sociales y culturales, que no sólo correspondían a la de un hombre de cierto éxito administrativo (fue un trabajador oficial) sino de su propio origen familiar (relacionado con los orígenes de la misma Colombia y personajes como Camilo Torres y Francisco José de Caldas); y eso es finalmente de lo que trata este gran documental, sobre la libertad, sobre la paradoja de la libertad, de no dejarse someter, pero aún así de no irse contra la corriente, de estar en el río que fluye y aceptando cada embate de ese río.
Zoom in: Seleccionado en diversas muestras y festivales, ganador en el Fondo para el Desarrollo cinematográfico.
Montaje Paralelo: Into the wild (2007)
Link: http://www.doncaeldocumental.com/
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